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La jardinería fue reconocida por primera vez como una forma de arte en Europa en el siglo XVI, cuando se convirtió en un símbolo de la "república ideal", evocando imágenes del Jardín del Edén. La Maestra Suprema Ching Hai, una jardinera entusiasta, ha elogiado la alegría de la jardinería en muchas ocasiones diciendo esto en una reunión con los miembros de nuestra Asociación en Francia: En su casa, si tienen terreno, incluso un pequeño jardín, cultiven algo ustedes mismos, también. Para que no siempre tengan que depender del supermercado. (Sí.) Y en caso de que algo suceda, siempre tener algo que comer. Es muy fácil cultivar víveres. La comida que puede nutrirlos no tiene que ser cara y difícil. Cuando estuve en Alemania, estaba casada. Tuvimos un pequeño jardín, y mi esposo y yo, sembramos tomates. Oh, crecieron tantos, tantos tomates. Y algunas flores para mi altar del Buda. Oh, crecieron, y crecieron y crecieron. Tantas flores, tantos tomates. Y también cultivé algo como menta, un poco de ensalada (lechuga), y algo de cilantro. No es mucho, por supuesto, ¡pero es tan lindo comer tu propia comida! Se siente tan bien.